Encontré esta carta abierta “anónima” entre los archivos de @valorarmagazine del debate del aborto del 2018. Buscaba escribir una editorial pensando en las jóvenes que nuevamente veremos en la calles portando una sentencia de muerte en la espalda. Al leerla, pensé, esta carta debo publicarla porque expresa claramente lo que muchos padres quisieran decirle a su hijos adolescentes que andan con el pañuelo verde colgado en sus mochilas y no saben cómo abordar el tema… Si conoces alguno compártesela. (Directora Valorar Magazine)
Hace unos días tuve la oportunidad de ir a la Feria del Libro, mientras esperaba en la fila para ingresar, veo delante de mí un grupo de cuatro adolescentes promediando 15 a 16 años. Todas ellas tenían anudados en sus mochilas de colegio, el pañuelo verde que identifica la decisión de estar a favor del aborto legal. Sinceramente, yo nunca había visto con detenimiento uno de ellos, ni sabía lo que decía. Entonces, con mucho respeto, les pregunté si me permitían ver uno para saber lo que decía. Me miraron extrañadas, entonces les expliqué que lo hacía, porque pensaba que para opinar sobre cualquier tema lo mejor era saber de qué se trataba, conocer lo más posible sobre aquello de lo que se estaba opinando.
Leí el mensaje y me llamó mucho la atención cómo está diagramado y que significan las tres frases centrales:
1. Educación sexual para decidir.
2. Anticonceptivos para no abortar.
3. Aborto legal para no morir.
Al finalizar de leer el mensaje se los devolví agradecida, sin hacer ningún comentario. Pero una de ellas inmediatamente me preguntó: “¿a favor o en contra?”. Contesté: “en contra”… después de ver la cara de desaprobación de las chicas les expliqué: “estoy en contra justamente por lo que les decía antes, cuando uno opina de algún tema, lo mejor es saber todo lo que se pueda sobre ese tema. Lamentablemente cuando yo tenía 17 años pasé por esa situación, la de abortar y fue una de las peores experiencias de mi vida, algo de lo cual uno no se recupera nunca, es una carga que uno lleva cada día y no es nada fácil”. En ese momento la cara de desaprobación cambió a sorpresa. Después de eso cada una siguió su camino.
Lo que me importa destacar en esta carta abierta, si bien todo el tema es inagotable, es el mensaje del pañuelo verde. La escalada de sus tres planteos, el engaño que se encuentra detrás de ellos y la victimización que plantea sobre las mujeres.
También quiero destacar una vez más, cómo se manipula a los adolescentes y se los pone a discutir sobre algo tan radical y trascendental como la vida o la muerte de un ser humano, cuando lamentablemente tenemos ejemplos sobrados de que son incapaces de analizar un párrafo y detectar una idea principal, leer un texto de corrido y comunicarse de una forma inteligible.
En primer lugar, cuando hablamos de EDUCACIÓN SEXUAL. Considero que si ésta falla en el hogar o no es la adecuada, los chicos de hoy cuentan con materias específicas sobre el tema, tanto en la educación primaria como en la secundaria. También existen clases extracurriculares dentro de las escuelas, charlas en los hospitales públicos de todo el país, libres y gratuitas y el vasto contenido que encontramos en los medios, internet y redes sociales, de todos los tonos y calibres… con lo cual en este punto estaríamos partiendo de una premisa falsa “SI HAY EDUCACION SEXUAL PARA DECIDIR” (hasta existen tutoriales en internet que explican cómo utilizarlos). La adolescencia de hoy no es que no cuenta con recursos como se intenta plantear, no es que no sabe de qué se trata. Tiene acceso a todo tipo de información, tal vez se trata de USARLA.
En segundo lugar, cuando hablamos de ANTICONCEPTIVOS PARA NO ABORTAR partimos de premisas falsas. Los anticonceptivos, actualmente, son de venta libre, no necesitan prescripción médica. Los preservativos se compran hasta en una estación de servicio. Los hospitales públicos periódicamente organizan campañas de distribución de píldoras, colocación de DIU, dispensadores de profilácticos y ahora también se practican ligaduras de trompas y vasectomías en forma gratuita. ¿Realmente la adolescencia y juventud de hoy no cuenta con anticonceptivos? ¿La adolescencia y la juventud de hoy ABORTA porque no cuenta con los medios anticonceptivos para evitar un embarazo? En cuanto a esto, quisiera destacar que una cosa son los métodos anticonceptivos, es decir, métodos que impiden la concepción. Otra muy diferente es abortar, que es un procedimiento quirúrgico que consiste en la interrupción del embarazo, extrayendo el feto (ser humano ya concebido) del vientre de la madre de la cual depende, provocando su muerte.
En tercer lugar, cuando hablamos de ABORTO LEGAL PARA NO MORIR. Lamentablemente la legalización del aborto no implica que desaparezcan los “antros” donde hoy se practican. Con este planteo se está empezando por el final en lugar del principio, ya que esos lugares deberían desaparecer en la actualidad, no por la legalización del aborto, sino por ser completamente ilegales ya que no cumplen con ningún tipo norma de bioseguridad y salubridad. Legalizar el aborto no implica lamentablemente que miles de mujeres dejen de morir, hoy muchas de ellas recurren a las pastillas de venta libre de colocación manual por vía vaginal, que inducen una hemorragia y, por tanto, la pérdida del bebe, pero muchas veces esas hemorragias no se detienen y las mujeres mueren desangradas sin que nada se pueda hacer.
¿No les parece que son demasiados temas para poner en tres simples frases en un pañuelo que se reparte en las escuelas sin ningún tipo de explicación?
¿Cuántas adolescentes que portan su pañuelo verde saben a conciencia de qué se trata la lucha que creen que llevan adelante? ¿Cuántas veces vemos en televisión mujeres adultas, jóvenes y adolescentes que no pueden hilar una frase coherente, inteligente que defienda su postura en contra de la vida? ¿Esta lucha se gana sacándose la ropa e insultando por las calles? ¿Hasta cuándo se va a seguir utilizando a la adolescencia o juventud como carne de cañón de las luchas sociales, mientras los que tienen poder de decisión toman café o whisky en sus grandes y lujosas oficinas???
Creo que las mujeres nos merecemos otro nivel de discusión, más digno, más inteligente, más realista, menos mediático, menos manipulador, más sincero.
YO DIGO NO AL ABORTO. YO DIGO SI A LA VIDA. YO DIGO NADIE MENOS
Fotos: Infobae, Mendoza post
Valor de la nota: La claridad, la sinceridad para graficar una realidad que muchos jóvenes no ven y que otros repiten sin entender.